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Virgen del Rocío incorpora la tecnología más avanzada para el tratamiento del cáncer
Publicada el: jueves, 16 diciembre 2010 | Escrito por Úrsula Palmar Gómez
El Hospital Universitario Virgen del Rocío acaba de incorporar tecnología avanzada de alta precisión para el tratamiento del cáncer. Se trata de un el acelerador lineal con arcoterapia volumétrica de intensidad modulada (VMAT, de sus siglas en inglés), guiada por imagen, que permitirá tratar a los pacientes oncológicos con la máxima precisión, rapidez y eficacia. El equipo, con su sistema de planificación y dosimetría física, y las obras de adaptación del búnker que lo alberga, ha supuesto para el sistema sanitario público andaluz una inversión de 1.960.564,92.
La principal ventaja de la tecnología VMAT es que reduce las dosis de radiación que reciben los tejidos sanos, concentrándose ésta en mayor cantidad y de manera más selectiva en los tejidos tumorales; el tratamiento gana en precisión, al mismo tiempo que en eficacia, explica María José Ortiz, responsable de Oncología Radioterápica, perteneciente a la Unidad de Gestión Clínica de Oncología Integral.
La combinación de una distribución precisa de la dosis de radiación, de forma controlada mediante un sistema guiado por la imagen y su administración mediante VMAT en un corto espacio de tiempo, permite aumentar la intensidad de cada sesión y en algunos procesos reducir el número total de sesiones necesarias. Por otra parte, la corta duración del tratamiento proporciona mayor confortabilidad para el paciente y reduce el riesgo de movimientos tanto del paciente como de los órganos internos.
En sus primeras semanas de funcionamiento, son ya un total de 16 pacientes, adultos y pediátricos, los que se han podido beneficiar de esta terapia de máxima complejidad que ha exigido una formación intensa y muy especializada de los profesionales de Radiofísica y Oncología Radioterápica, al mismo tiempo que un reto científico para los mismos.
Es un sistema revolucionario que permite la variación simultánea del ángulo de incidencia, la intensidad de la radiación, la forma del haz que incide sobre el paciente o la velocidad de rotación, añade Miguel Herrador, responsable de Radiofísica Hospitalaria. Para el control del tratamiento en tiempo real, garantizándose con ello la máxima precisión, el acelerador lineal incluye dos sistemas de imagen: el sistema de visualización del haz dentro del propio paciente y el sistema de verificación de posicionamiento del paciente. Este último es un equipo de tomografía computarizada (TC) que toma imágenes durante el tratamiento y las compara con las utilizadas previamente para el diseño del mismo. Ante posibles cambios, el equipo realiza automáticamente los ajustes necesarios para que el tratamiento sea el adecuado.
Estas prestaciones son especialmente importantes en los casos de lesiones cercanas a órganos críticos sanos, en los que se desea evitar su irradiación como pueden ser recto, médula espinal, estructuras nobles intracraneales, corazón ó en aquellas situaciones en las que por una irradiación previa los órganos sanos ya han recibido una dosis en el límite de sus tolerancia.
