La Medicina Nuclear es una especialidad médica que utiliza sustancias radioactivas (radiofármacos) para el diagnóstico y tratamiento de distintas enfermedades.
Las pruebas diagnósticas (gammagrafías y PET) no son agresivas y no necesitan ingreso hospitalario para su realización. Se utilizan frecuentemente para apoyar el diagnóstico en Cardiología, Oncología, Endocrinología, Pediatría y otras especialidades médicas.
También se realizan tratamientos con sustancias radiactivas en algunas enfermedades , en algunos de estos tratamientos si es necesaria la hospitalización en nuestra unidad de Terapia Metabólica
Son pruebas en las que se utiliza una pequeña cantidad de radioactividad con el fin de obtener imágenes en equipos llamados gammacámaras o tomógrafo por emision de positrones (PET), que ayudan al médico a hacer el diagnóstico y el tratamiento en la enfermedad.
Normalmente, el radiofármaco se inyecta en una vena del brazo. El paciente deberá esperar un periodo de tiempo hasta obtener las imágenes, que será variable en función del tipo de estudio realizado.
Para la adquisición del estudio el paciente debe quitarse todos los objetos metálicos y permanecer inmóvil. En general, no es necesario quitarse la ropa. Es conveniente que acuda con ropa cómoda.
Depende de la prueba solicitada. Generalmente entre 30 y 60 minutos. Hay pruebas que requieren varias exploraciones durante el mismo día y otras en diferentes días. Se informará puntualmente cuando sea necesario efectuar varia exploraciones.
El tiempo de espera dependerá de la exploración a realizar. No todos los pacientes tienen que esperar el mismo tiempo, por lo que a veces pasarán antes pacientes que han llegado después que otros.
Tan solo molestará un poco el momento de la inyección, como cuando se realiza un análisis de sangre. Esta no le produce ningún efecto ni le impedirá al paciente hacer su vida normal
Por lo general no es necesario. Cuando así fuera (venir en ayunas o suspender algún tipo de medicación) se le informará al paciente.
En cualquier caso es conveniente que antes de la inyección el paciente haga saber la medicación que está tomando o si es alérgico a algún medicamento.
Puede que se aconseje beber agua o zumos en mayor cuantía de lo habitual para facilitar la eliminación del radiofármaco inyectado.
Generalmente no tendrá que tener cuidado alguno adicional.
La cantidad de radiación que recibirá es muy pequeña, similar a la que se recibe cuando se hace una exploración radiológica convencional.
Dada la característica de los productos utilizados es extraordinariamente infrecuente la aparición de efectos adversos y secundarios.
Es preferible que el paciente no venga con mas de un acompañante y muy importante que no le acompañen mujeres embarazadas o niños pequeños.
Es conveniente que el paciente no esté cerca de los niños o de mujeres embarazadas el resto del día. Esto evitará exponerlos a una radiación innecesaria, aunque esta sea mínima.
Si, los niños reciben todavía menos radiación, ya que la dosis se adapta a su peso. Además el médico ha considerado que la información que aporta esta prueba justifica esta pequeña radiación.
Esta prueba esta contraindicada en el embarazo salvo en algunas situaciones excepcionales, por eso es importante que se informe antes de la inyección si está embarazada o cree que puede estarlo.
Algunas sustancias radiactivas pueden eliminarse con la leche materna. Si la paciente está en periodo de lactancia debe comunicárnoslo antes de la prueba y le daremos las indicaciones necesarias.
Habitualmente no hay ningún problema salvo si se trabaja con niños, mujeres embarazadas o si el trabajo implica recibir algún tipo de radiación, en cuyo caso el paciente debe comunicárnoslo para darle información adicional respecto a medidas de protección radiológica.
El informe así como las imágenes de la prueba se mandan al doctor que la ha pedido y queda colgada en la historia digital del paciente.
El tratamiento ha sido indicado por un médico estando justificada la radiación que se recibirá por el beneficio que se obtendrá. Estos tratamientos no son agresivos ni dolorosos y pueden necesitar ingreso hospitalario. Previamente al paciente se le darán instrucciones específicas y precisas.