Si te has sometido a una cirugía, los siguientes consejos pueden ayudarte para el cuidado correcto de estas heridas en verano.
Una herida es una separación de la piel con exposición del tejido que hay debajo de ella que se denomina tejido celular subcutáneo. Las heridas abiertas son aquellas en las que los bordes de piel se dejan separados y la cicatrización se produce desde el fondo de la misma a la superficie. Son heridas más delicadas ya que al no tener la barrera protectora de la piel son más propensas a las complicaciones (infección, sangrado, etc). Por otro lado, las heridas cerradas aquellas en las que los bordes de la piel se unen mediante dispositivos de sutura (grapas o hilos), se mantiene la integridad de la piel y son menos propensas a complicaciones.
Debes ser extremadamente cauto con este tipo de heridas. Normalmente se realizarán curas por parte del enfermero de Atención Primaria y estarán cubiertas con un apósito. Los consejos para el cuidado de estas heridas en verano son:
En este caso podemos ser más laxos en su cuidado, aunque respetando una serie de principios: